Explicación de la erupción del volcán Tonga.
La erupción ha volado por los aires el puente de lava solidificada que unía la isla de Hunga Tonga y de Hunga Ha’apai, formado en 2014 y el tsunami podría ser el primero de varios.
Si 2021 lo terminamos con la erupción del volcán de La Palma, 2022 lo empezamos con otro volcán, aunque esta vez muchísimo más lejos, prácticamente en nuestras antípodas. El volcán en cuestión recibe el nombre de Hunga Tonga-Hunga Ha’apai, un nombre compuesto, en realidad, por la unión de las dos islas que se fusionaron durante otra erupción, en 2014. Hunga Tonga y Hunga Ha’apai eran dos trozos de tierra emergidos del mar y sin conexión visible, pero entre noviembre y diciembre de 2014 se produjeron una serie de erupciones y, la lava expulsada, se solidificó formando un puente de tierra entre ambas islas.
Por lo general, estas estructuras no duran mucho, apenas unos meses antes de que las olas las erosionen, pero en este caso llevaba ya 7 años, soportando los embates del agua. Los expertos creían que, viendo el ritmo de su erosión, podría llegar a sobrevivir otros 30 años, pero claro, en ese cálculo no tenían en cuenta que se repitiera una erupción justo bajo la isla.
LA ERUPCIÓN
La erupción tuvo lugar el sábado y ha emitido una columna de ceniza de 20 kilómetros de altura, desapareciendo la unión entre las islas y produciendo un sismo que, por ahora, ha sido clasificado con magnitud 4. Tan solo 15 minutos después, las olas han llegado a la costa de Tongatapu, recorriendo los 65 kilómetros hacia el sur que los separan. A la velocidad a la que se desplazaban, no les fue demasiado complejo adentrarse en la isla, anegando el litoral y las primeras líneas de edificios.
El gobierno de Tonga, el país al que pertenecen las islas, ha estado informando sobre la situación y, por precaución llegó a solicitar que se evacuaran las zonas costeras durante un tiempo prudencial. Y, para hacernos una idea de lo que implica una medida aparentemente tan sencilla como “aléjense de la costa”, conviene recordar que Tonga está compuesto por 71.000 habitantes repartidos en más de 170 islas, la más grande de las cuales, Tongatapu, tiene una superficie de 260,5 kilómetros cuadrados, o para visualizarlo mejor: 1000 veces menor que Tenerife y, 10 kilómetros cuadrados más pequeña que El Hierro.
El “tsunami menor” que ha llegado a algunas costas del pacífico americano ha causado daños moderados y, por ahora, no se ha reportado la existencia de víctimas mortales. No obstante, parece que ha dejado varias zonas de México incomunicadas, Perú ha anunciado una anómala subida de sus mareas, ha habido inundaciones en Hawaii y varias islas del Caribe dicen haber percibido un oleaje poco habitual. El caso más llamativo es, tal vez, el de Chile, que ha sufrido un “tsunami menor” en la Isla de Pascua. Por suerte, no ha habido tsunamis graves, aunque todavía no podemos descartar que los llegue a haber.
¿POR QUÉ?
La geología es uno de esos grandes desconocidos de la población general, apenas nos dan un puñado de nociones sobre ella en la escuela y, por lo tanto, cuando ocurre algún evento relacionado con esta ciencia, nos quedamos algo descompuestos. Para resolver las dudas más básicas sobre este evento, podríamos empezar por el principio. El volcán de Hunga Tonga y de Hunga Ha’apai se encuentra sobre la zona de subducción de Kermadec-Tonga. La corteza terrestre (su capa más superficial y rígida) está formada por placas que se mueven unas respecto a las otras. En este caso, en la zona coincide, por un lado, el límite de las placas de Kermadec y Tonga, por otro, el límite de la placa pacífica, que subduce o, dicho de otro modo: la pacífica se va hundiendo bajo la de Kermadec y Tonga. La corteza hundida va aumentando su temperatura a medida que bucea en el manto terrestre (sólido pero plástico en sus capas más superficiales).
El mecanismo que sigue es complejo, pero a grandes rasgos, la corteza sumergida y el agua que arrastra se calientan liberando dióxido de carbono y vapor de agua, cuya baja densidad hace que asciendan violentamente hasta la superficie, rompiendo la corteza y empujando magma a la superficie (contado de forma muy simplificada). Esto ha dado lugar al arco de islas volcánicas de Kermadec-Tonga, entre las que se encuentra la isla del volcán que ha entrado en erupción. De hecho, los volcanes de estas islas están mayormente conectados a través de sus cámaras magmáticas, esas zonas del subsuelo donde se encuentra su lava.
EL TSUNAMI
Los tsunamis se deben a fuertes movimientos de tierra, principalmente en el fondo de los océanos. De hecho, la principal causa de tsunamis son los terremotos submarinos, la segunda los deslizamientos del terreno y en tercer lugar las erupciones volcánicas. Cualquiera de estas actividades puede mover verticalmente el fondo marino, obligando a la columna de agua que hay sobre él a redistribuirse, como cuando ponemos la palma bajo la superficie del agua y la levantamos un poco de forma brusca. Las olas producidas pueden viajar largas distancias sin apenas perder energía, llegando a costas realmente alejadas (en parte, también, por cómo viajan las ondas sísmicas a través de la tierra, haciendo que el temblor sea muy perceptible lejos del lugar donde se originó).
Aunque el peligro ya parece haber pasado, no puede descartarse que haya más erupciones en los próximos días, las cuales produzcan, a su vez, nuevos tsunamis. Por suerte, las autoridades están vigilantes y los países en riesgo serán alertados con tanta antelación como fuera posible.
En Geotecnia Alperi S.L. , además de los estudios geotécnicos y geológicos ,que realizamos principalmente en Bizkaia, Asturias y Cantabria ; nos interesan las diferentes disciplinas que están relacionadas con la historia y el estudio de la Tierra y el nuestro propio.
Fuentes Documentales:
https://www.larazon.es/ciencia/20220116/xu4uwsdykjhxvcwuia22y5xnpq.html